domingo, 20 de septiembre de 2020

La voz del ciervo (Marisa Negri)






En el susurro de la hierba
y en el grito de la pavas
que hacen girar los engranajes del mundo
se quema la isla
en el ondular de los peces
que dejan apenas un trazo en el agua
y en el hueco que la ranita saltadora cavó debajo del ingá
se quema la isla
y más profundo
y mas leve
en el encaje de ñandutí que reveló el rocío
y en los mil huevos rosados que esperan en los tallos
se quema la isla
bajo la sombra de las hojas duermen su sueño las crisálidas
y el colibrí va veloz hacia el perfume
hay humo en el aire.
¿Qué haremos con lo que arde,
con lo que oprime y pavimenta lo no domesticado?
Escucha
La voz del ciervo.
Escucha
la voz del ciervo:
no somos tan distintos
también tu vida
lleva su porción de muerte.
foto: Lisandro Dorisboure (Itekoa, aldea de agua)

domingo, 10 de mayo de 2020

Dos poemas de Daniel Saimolovich








La casa del Tigre

Tenemos una casa en Sudamérica.
Aquí están los perros sin dueño,
el río, las palmeras del verano,
el arbolito enmarañado
de las rosas silvestres,
las luces diagonales en otoño.
Acá vino a parar la ropa vieja,
el silencio, los vasos desiguales,
los miembros más longevos
de razas diferentes, hermanados
por el azar, por un descuido de la muerte.


La garza mora

No la vi llegar, de pronto
pasaban cosas raras con la luz
entre los juncos, allí enfrente.
Sin aviso, sin causa eficaz
la garza mora, gigante de los pájaros,
estaba frente al muelle.
Más tarde voló,
acariciando el aire,
moviendo apenas las alas poderosas.
Como si temiera, incluso volando
ir demasiado lejos en sus conclusiones.


Daniel Saimolovich (Buenos Aires, 1949) Publicó Párpado (1973), El Mago (1984), La ansiedad perfecta (1991), Superficies iluminadas (1997), entre otros. Dirigió la revista Diario de poesía.